En el “Terry” hubo Festival… con Calcetines, mentiras y vino

En tono de tragicomedia, Álvaro Solar asumió sobre las tablas del “Tomás Terry” el monólogo Calcetines, mentiras y vino. / Fotos: Dorado

En ocasión del XV Festival Internacional de Teatro de La Habana —del cual Cienfuegos devino una de las siete subsedes provinciales—, se presentó en la sala principal del coliseo “Tomás Terry” el actor extranjero Álvaro Solar. Este sábado en el horario de las 9:00 p.m., y domingo a partir de las 5:00 de la tarde, el público asistente apreció la interpretación de su tercer unipersonal titulado Calcetines, mentiras y vino.

Anunciada en el programa de mano en tanto “una obra musical de teatro sobre verdad, mentira y aquello que hay entremedio”, la pieza motivó la reflexión desde las primeras líneas del texto. “¿A mentido usted hoy?”, preguntó al resto el autor/personaje. Y como a propósito del estreno en Bremen, Alemania, el 8 de noviembre de 2006, bajo la dirección de Francesca De Martin, aquí, al centro sur de la Mayor de las Antillas, el también diseñador gráfico planteó disímiles cuestionamientos, comunes y filosóficos, acerca del entorno y los frutos de la invención humana, la vida y la muerte, la paz y la guerra, la pasión y el odio…

Durante un viaje de casi dos horas y media a su infancia, al origen del ser, en canciones, el nombrado “poeta del arte de la narración” ejemplificó los extremos sujetos a análisis. ¿Nexo entre ambos en cada caso? El vino, elemento socializador, capaz de suscitar la cavilación y hasta de sumar en tal empeño a dos espectadores. 

“En un absoluto estilo del realismo mágico de su patria latinoamericana cobra vida todo en el mundo de Solar; todo tiene un rostro, una voz y un alma. Incluso los agujereados calcetines que en la noche secreta del dormitorio se quieren escapar sigilosamente para no terminar siendo pelotas de trapo, sustituyendo el balón de fútbol de los niños de su pandilla (el Nada, el Trampa, Cabeza (él, relator), el Profesor, el Gordo, el Patá en la Raja, las mellizas Ana y Ana Pero Al Revés)”, publicó el periódico digital Kieler Nachrichten.

Según se lee en el sitio http://www.alvarosolar.com, Solar nació en Talca, Chile, pero reside en Bremen, Alemania, desde 1978. Empezó a desempeñarse dentro de las artes escénicas, de manera profesional, tras integrar el dúo Erwi & Alvi. Entonces experimentó el éxito con las producciones Don Quijote y El viaje a Talca, por solo referir algunas. De 1993 al 2000 trabajó bajo la categoría de “actor invitado” en el Müchner Volkstheater (Teatro Popular de Munich), aunque ya dos años antes de la última fecha comenzó a actuar como solista. Entre otras propuestas asumidas por quien ha fungido además en calidad de músico y director, figuran Johan Padan descubre América, Ibericus. No todos los caminos conducen a Roma, Recetas para la vida, Marcha de los Itakas y Pájaro en tránsito. En varias naciones del orbe —dígase Suiza, Austria, Letonia, Suecia, Holanda, Bélgica, Italia, El Salvador, República Dominicana, Chile y los Emiratos Árabes— ha puesto a consideración su talento, y ha obtenido premios. Al mencionado encuentro celebrado en la capital cubana ha asistido con anterioridad, y en virtud de ello mereció la condición de “Invitado Ilustre”.

El Festival Internacional de Teatro de La Habana, en su edición decimoquinta, quedó inaugurado el pasado 25 de octubre. Se extenderá hasta el venidero 3 de noviembre y rendirá homenaje al 150 aniversario del natalicio del actor ruso Konstantín Serguéievich Stanislavski (1863-1938). Fue la elogiada puesta en escena Ana Karenina, esta vez con versión del Teatro Estatal Académico “Evguéni Vajtángov”, de Rusia, la encargada de abrir el evento que comprenderá 76 espectáculos, entre estos, montajes provenientes de Argentina, Brasil, México, España, Estados Unidos, China y Francia… 19 países en total. De acuerdo con la agencia Xinhua, en opinión de Noel Bonilla Chongo, comisionado artístico de tal cita no competitiva surgida en 1980, así se pondrán de manifiesto las disímiles tendencias del arte escénico de hoy en el mundo.

Escrito por: Lisandra Marene